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Era su último deseo. Tras la misa, incineraron el cuerpo de R. F. y los familiares y amigos tomaron sus cenizas y las llevaron a la fábrica pirotécnica de la carretera que cruza el polígono B-120. Allí les aguardaba preparado un gran cilindro de cartón en el que introdujeron las cenizas mezcladas con arena y un compuesto de carbonato de estroncio (12 %), dextrina (3%), hexamina (7%), magnalium (5%), óxido de cobre rojo (8%) y perclorato de amonio (65%), que produciría una preciosa flor en cascada de color púrpura brillante sobre la bahía en las fiestas patronales del pueblo de R. F. Dos semanas después montaron el cohete con los restos de R. F. en el castillo pirotécnico situado frente al ayuntamiento. Una hora después cayó una enorme tromba de agua que inutilizó alguno de los cohetes. Esa noche, a las doce en punto, con motivo del fin de las fiestas patronales, prendieron la mecha del castillo y los vecinos del pueblo disfrutaron de una magnífica sesión de fuegos artificiales que duró aproximadamente veinte minutos. El cohete con los restos de R. F. nunca explosionó. Las cenizas de R. F., revolviéndose en la arena mojada, se dijeron «qué mierda de último deseo».
viernes, 18 de abril de 2008
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17 comentarios:
También fue mala suerte que lloviera. ¿Pusieron música de abba por megafonía?
No que yo sepa. La banda municipal tocó «Paquito chocolatero», «Canta y no llores», «Cántame un pasodoble español», «Que la detengan» (la de David Civera) y «El beso en España». Es triste, sí.
Pués si, vaya pirotécnia que no tapa sus fuegos oiga.
Un año que ví quemar una falla de demasiado cerca, un pedacito de esa ceniza se me incrustó en el ojo.Una semana amargado la broma.
Harry, o tengo defecto de visión o su rótulo se vé borroso. Tal vez es mi equipo, no sé, las gafas las he limpiado por si acaso. Por cierto, que cuando más las limpias más rápido se ensucian.
¿Pero no sabe qué dia conmemoramos hoy?
¡¡No me diga que es el día de todos los ciegos¡¡
(vale, que no lo sé)
entre los diversos motivos de celebración, encontramos el cumpleaños del secretario del ayuntamiento de munitibar
felicidades, joven!!!!
por lo demás, en la elección del último deseo, se pretende encontrar una buena idea sin dedicarle la imprescindible atención
reivindico una plataforma por la elección de un buen último deseo!
k
Oiga, que yo he hecho los deberes en San gugle y naita, tengo una laguna mental importante (otra).
Usted recuerde, Trikki. Las cabeceras tienen nombre y en el nombre está la razón.
Caramba, es cierto, ví en las efemérides el terremoto de San Francisco.Ví la peli de Gable con unos ocho años y tuve una pequeña temporada que temí que la tierra se abriera bajo mis pies.
Más grave fué lo de "la invasión de los ultracuerpos" que también ví por aquella época.Que no había quién se durmiera oiga.
¿Temió que la tierra se abriera bajo sus pies? ¿Y no lo teme ahora? Las mismas probabilidades hay. Yo lo temo siempre, aunque hay ratos que me olvido, pero temerlo, lo temo siempre. En parte porque el jarroncito de cristal negro art decó que tiene mi señora sobre la librería se iría al carajo y me gusta especialmente.
En realidad, tengo miedo a todos los fenómenos naturales. Terremotos, maremotos, tormentas, volcanes, abejas e incendios. A Keira Knightley también.
Ah, ¿esa que no tiene cintura, ni tetas?
¿Que no tiene cintura? pero si tiene una de las cinturas más largas del planeta (como palmo y medio de las costillas flotantes a la caderas). Y unos abdominales con chocolatina que para mí quisiera. Tetas, lo que se dice tetas, pocas, para qué vamos a engañarnos. Pero no todo van a ser tetas. Recuerde esa frase rara y vieja que dice «teta que la mano no cubre, no es teta sino ubre» (del alemán: «Tit, dass die Hand nicht decken, aber es ist nicht tit Euter». Pues eso. Y lo molestas que resultan para hacer jogging. Nada, está sobrevalorado eso de los pechos grandes.
también está, en laabiduría popular refranera, el dicho de
Teta que cubre la mano
no es teta sino grano
lo que nos acerca a su origen campesino, donde las mujeres no hacían jogging
k
Pues si le dan miedo los temblores de tierra, Harry, me imagino que los terremotos endoplacalaes que se describen en el libro de Bryson le harían un nudo en la garganta, con esas olas de tierra y esas tierras que se abren y esos cientos de kilómetros que recorren. Si además te dicen que pueden ocurrir en cualquier momento y en cualquier sitio porque no le hace falta choque de placas para que se produzcan, es más, no se sabe cómo ni por qué se producen, pues eso: que acojonan los terremotos endoplacales.
Y está la otra versión tetuna, Harry, "teta que cubre la mano, no es teta sino grano" (del coreano 손을 커버하는 젖꼭지는, 곡물 젖꼭지가 그러나 아니다). He puesto el coreano porque hay un señor oriental que ha visitado su fiji y que no ha tenido el detalle de visitar el mío. Desconsiderado.
Mi Santa dice que sobre todo para ellas deben ser molestas de la leche, yo no puedo opinar, aún no llevo. (No pierdo la esperanza).
Harry hombre, que con ocho años uno es más influenciable por el cine que vé, ahora ese miedo ha desaparecido, pero existen otros en forma de número, 115, 130, 347, todos ellos modelos de hacienda.
No hay teta sobrevalorada, o al menos no la conozco.
OE
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