jueves, 13 de noviembre de 2008

El sacrificio

Y aconteció que Dios llamó a una oveja, y le dijo: «oveja». Y la oveja respondió: «Heme aquí». Y dijo: «Toma ahora tu hijo, tu único, a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en sacrificio sobre uno de los montes que yo te diré». Y la oveja se levantó muy de mañana, y tomó consigo dos ovejas familiares suyas, y a su hijo, el carnero, y fue al lugar que Dios le dijo. Al tercer día alzó la oveja sus ojos, y vio el lugar de lejos. Entonces dijo la oveja a sus compañeras: «Esperad aquí y yo y el carnero, mi hijo, iremos hasta allí, y adoraremos, y volveremos a vosotras». Y llamó la oveja a su hijo y fueron ambos juntos. Entonces habló el carnero a la oveja, su madre, y dijo: «Madre mía». Y ella respondió: «Heme aquí, mi hijo». Y él dijo: «Aquí estamos los dos, pero ¿dónde está la bestia para el sacrificio?». Y respondió su madre, la oveja: «Dios se proveerá de bestia para el sacrificio, hijo mío». E iban juntos. Y como llegaron al lugar que Dios le había dicho, dirigió la oveja a su hijo, y trabó sus cuernos a una zarza que allí había. Y cuando su hijo, el carnero, se vio con los cuernos trabados a la zarza agitó su cuerpo para liberarse, pero, aunque se agitó y cabeceó con todas sus fuerzas, sus esfuerzos fueron en vano. Entonces el ángel de Dios le dio voces del cielo, y dijo: «Oveja, oveja». Y la oveja respondió: «Heme aquí». Y dijo: «Tu trabajo ya ha terminado, oveja, ya puedes marchar, deja aquí a tu hijo y tú vuelve con las demás, al rebaño». Y la oveja giró la cabeza para mirar a su hijo y sintió mucho pesar, y se le hizo un nudo en la garganta que le impidió decir palabra para despedirse. Y bajó por la ladera con la cabeza gacha y con mucho dolor en su espíritu. Y entonces vio cómo subía por el camino un hombre con un muchacho que llevaba leña sobre los hombros y un gran cuchillo. Y la oveja sintió mucho miedo en todo su cuerpo, y sintió que sus patas temblaban como las hojas de los sauces y que sus ojos se llenaban de lágrimas. Y bajó corriendo por la ladera y sus balidos se escucharon en el valle durante toda la noche, hasta la mañana siguiente, y la noche siguiente volvió a lamentarse, y así se escuchó en todo el valle, y así hasta trescientas noches que no dejó de balar.

25 comentarios:

Zacarías Plissken dijo...

Y digo yo, ¿es que Dios no puede pedir 20 euros para ir tirando, como todo el mundo?. Noooo, tiene que pedir una vida, para lo que le va a servir...

Hola a todos, por cierto.

Anónimo dijo...

Pobre corderillo, por dios.
Bueno, por dios no, que es el culpable.

Harry Sonfór dijo...

¡Bienvenido, Elradia!

Badil dijo...

Y la respuesta correcta es ...la A: el bestia es el señor.

Miranda dijo...

Ay! pobre ovejuca, qué pena más grande...

Por cierto, que no veo la fotaca, se ve todo negro negro, a no ser que sea un efecto deseado por el artista...
Nousei...

Beso.

M.

Harry Sonfór dijo...

Oiga, Miranda, pero ¿se ve todo negro negro o se percibe el niño vestido de paz, el león, la oveja y todo eso, aunque sea oscuro?

Javier de la Iglesia dijo...

"...tomó consigo dos ovejas familiares suyas..."

Gracias, Harry, por la carcajada de esta mañana; con ella he podido enfrentar la jornada de otra manera.
La mejor medicina.

Harry Sonfór dijo...

Me alegra mucho, Javier, que le haya dado alegría la entrada. Sabe que siempre es un gusto verle por aquí.

Miranda dijo...

Pues...se ve una vaca, creo...un niño en camisón y algo como una ovejuca, pero negro negro de c.

A ver si hago un pantallazo.

En realidad si solo soy yo la que lo ve negro no será cosa de preocupar.
Será el monitor que lo tengo mal equilibrado.

Que tengo monitor y teclado de esos de Apple (platino y blanco, desos) y le he puesto memuar al iboock y estoy encantada...o lo estaba hasta ahora que no veo el santuco.

Ay!

Harry Sonfór dijo...

Oiga, Miranda, que ya le he aclarado un poco el cuadro de William Strutt. Es que si lo pongo con su color natural les va a producir a todos ustedes una hiperglucemia. Así oscurico mejor.

Badil dijo...

Ahora hasta se ve uno haciendo el ganso

Miranda dijo...

Na, que no.
Así que me lo he bajado, lo he tirado en el iphoto y le he dado a "mejorar" y ha aparecido todo ello, un león, y hasta un leopardo y un angel por el fondo fumigando los campos, creo yo...

Que colmo!

Harry Sonfór dijo...

Ojo, Miranda, que si le da varias veces a «mejorar» con el iphoto igual le mejora tanto la imagen que deja de ser un cuadro pacato de William Strutt y se le convierte por arte de Iphoto en otro de Art Frahm de esos que pintaba, con señoras de goma floja. Qué grande Art Frahm.

Harry Sonfór dijo...

Oiga, no, Badil, que el ganso es un ángel (creo).

Badil dijo...

Si, hombre... y la térmica de Andorra que está a otro lao me dirá usté que es una zarza ardiendo....

Harry Sonfór dijo...

No, no, la central térmica de Andorra sí que es la central térmica de Andorra, eso no se puede negar.

Helter dijo...

Entre esta historia, y un vidrio que vi ayer sin querer de una broma pesada que le hacían unos gamberros a una madre burra, estoy casi por hacerme vegetariana. Y atea. Bueno, vegetariana no.

Arkab dijo...

¿Y las dos ovejas familiares? ¿Qué pasó con ellas? ¿Balaron también corriendo por laladera?

Harry Sonfór dijo...

Las dos ovejas familiares esperaron y esperaron y como no llegaba la oveja madre fueron bajando hasta llegar al lugar donde pastaba el rebaño, Arkab. Creo, vaya.

gregor dijo...

Buenos dias, señor sonfór.
Si algo queda claro en la historia, es que a dios lo que le gusta para comer es el carnero y ,aparte de jugar con los dados trucados, ejerce de Juan Palomo...
El problema viene cuando es él quien invita a comer...¿que da? de normal maná, que vamos, no nos engañemos...lo que es de sabor, por lo que cuentan, flojo.
También, con suerte y después de aguantar un sermón, te puede dar pan y sardinas...
Vamos, mucho dios omnipotente y tal, pero las chuletas a la brasa se las jala él...
En fin, lo dicho, que sean buenos los dias.
Un saludo

Anónimo dijo...

Pues omnipotente no sé, pero lo que es justiciero... ya se ve. Yo ya me di cuenta del asunto cuando me enteré de lo de Noé: agarra el tío y se coge una chufa inmensa, que le dio, como a algunos de mi pueblo, por quitarse los pantalones (o los sayones, en su caso) y quedarse con el culo al aire. Le reniega su hijo pequeño por borrachuzo y el abuelo Noé agarra y se coge tal cabreo que maldice... ¡a sus nietos! Y a los chicos les fue fatal desde entonces. Y dios, oiga, pues no movió un dedo, que le debió de parecer bien.

¿Hay derecho? Pos no. "La justicia divina es a la justicia lo que..."

Badil dijo...

De ahí lo del ángel fumigador-exterminador del cuadro, que como no le hubiese llevao el carnero "sus vais a jartar de pesticidas, maños. Vusotros ,vuestros hijos y los que se os coman que no sea yo"

Harry Sonfór dijo...

Muy buenos días, señor Gregor.

Arkab dijo...

Oiga, Harry, ¿cuando usted dice lo de sexo oral con osos se está refiriendo a sexo hablado con osos? ¿Cierto? Bien, o sea, algo como si usted va paseando por el Parque de Yellowstone y se encuentra con Bubú y le dice éste «oye, que me estoy poniendo palote ná más verte, ¿te apetece que te haga el abrazo del oso, tigre mío?».

Harry Sonfór dijo...

Pues algo así, Arkab, pero con el añadido del contacto bucogenital que se dice, sí. Eso sería sexo oral, creo. Ojo, que el El resplandor tampoco es que se vea eso, que igual es que el oso ese raro le está cosiendo un botón de la bragueta al señor elegante y como todos somos unos malpensaos pues pensamos lo otro (pero, eh, la primera que lo piensa es Shelley Duval, que si no no pondría esa cara de susto aymadreloquehevisto).