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Así, todas las noches, cada vez que se acostaba en la cama, cuando su cuerpo se adentraba en el estadio de la duermevela, esa fase entre la vigilia y el sueño que, con paciencia, pone a disposición de los durmientes la posibilidad de entrar en contacto con todos los muertos, una voz le gritaba su nombre, con gravedad, como una alarma, y acto seguido se despertaba, inquieto.
jueves, 11 de febrero de 2010
La voz
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9 comentarios:
Pero eso es porque se llamaría Paco o Pepe (o Harry), son mombres que se gritan rápido, "¡Pacooooo!".
Si te llamas Telesforo por ejemplo la voz de ultratumba al final se harta y te deja en paz.
Hombre, no me haga las fotos con gafas de sol, que luego salen como salen.
yo lo que oigo a esa hora dentro del coco es mucho bullicio, mucho jaleo, mucho palabrerío suelto
no sé si serán mis ancestros (que tengo muchos), los duendes de la casa, los espíritus afines y desafinados o qué
pero qué griterío, con lo que me molesta el ruido
Harry, esa Monstera deliciosa de la foto me recuerda que usted se estará preguntando a gritos cómo va mi tableta de chocolate tras mi paso por el gym. Bien, usted me lo pregunta y yo le respondo: ya he llegado a los 600 abdominales diarios ─ojo, cada día que toca─, que no son nada comparados con los 2.500 del chiquinino con bigote que se acuesta con A. Bottle, pero que me permiten disponer de una fuerte, atlética, dura, apetecible, golosa y envidiada musculatura abdominal u tabla de lavandera. Fíjese si es hermosa que he tenido que ocultarla y protegerla con una pequeña capita de grasa u barriguita cervecera para no provocar miradas lascivas entre la concurrencia feminoide, oiga. Pues ya está enterao.
¡Uy Telesforo! ¡Uy Telesforo! Pues anda, que si te ponen Brhadaranyakopanishadvivekachudamani, como al muchicho este, te se hace la mañana.
Mira mira:
http://www.26noticias.com.ar/el-nombre-mas-largo-del-mundo-a-bebe-mexicano-le-ponen-uno-de-36-letras-93707.html
Tojunto
Yo lo que me molesta en la duermevela es aquella sensación de que la conciencia empieza a escurrirse por el desagüe.
A veces he oido alguna voz llamándome, pero ha sido en estado de vigília, y cuando me giro ya no me dicen nada más: será que los espíritus se les olvida lo que querían decirme...
Y respecto a lo que comenta Miguelgato: yo conocí una Telesfora y bien bonito era el nombre, y no la confundían con nadie ni la tenían que diferenciar por el apellido. también tenía un vecino llamado Fulgencio y bien bonito que es el nombre, también.
Pues mire que no es mala solución lo de cambiarse el nombre, miguelgato.
¿Que ha salido muy oscura o qué, Helter? ¿Y para qué está el potocho pues?
¿Ve, Inde? a usted también le pasa. Con más gente, pero le pasa. Yo es que soy más de uno en uno. Primero uno, luego otro. Lo otro ya es un fiestón.
Pues es verdad, Arkab, que me dije «voy a poner una foto con una Monstera deliciosa a ver si así Arkab cuenta cómo anda con lo de su tableta». Recuerde que los abdominales estar están, solo hay que sacarlos a relucir, de dentro afuera. Oé.
Bah, Tojunto, si total lo van a llamar Có, o Chico, o Brá, o Eh, como a todos...
Es posible, Gloria, que usted oyera voces pensando que estaba en estado de vigilia pero en realidad se encontraba ya con la pestaña pegada. Los aparecidos se suelen aparecer en ese momento, y luego los que los han visto dicen que estaban muy despiertos. A no ser que lo suyo sea un acúfeno parlante, que también los hay. Copón, mire, servidor está ahora con un acúfeno de esos de grillos, que sé que es un acúfeno porque hoy los grillos no cantan. Si ha nevado y todo.
Esperen que miro.
¡Hala, si ha vuelto a nevar!
Un día les cuento la preocupación que tengo con mi falta de empatía cuando veo nevar, con el fútbol y con los fuegos artificiales. No sé, la gente se suele ilusionar cuando ve nevar. Es falta de empatía o algo así. me da cierto corte eso, así que lo disimulo poniendo cara de que me agrada ver nevar pero, leche, no siento nada. Cero. Nada.
—¿Y con el circo del sol también le pasa, que no siente nada?
—No, no, por el amor de dios, el circo de sol solo me lo tienen que mentar y ya me salen ronchones por todo el cuerpo y me entran ganas de golpearlos sin parar y quemarles la carpa.
—Ah, pues entonces no es falta de empatía con todo lo que empatiza el ser humano, como los asesinos en serie.
—No, no, que no, es con alguna cosa, no más. Con lo demás empatizo, para bien o para mal.
Harry, ¿lo del fondo es un poto?, la maceta del pie de la cama digo. Que, no sé por qué, no lo veo bien...joplas, que voy a tener que ir al oculista parece.
Por cierto, yo por la noche a veces oigo a la Ainhoa pidiendo agua. No me da tiempo a más. Tiempo u oído, claro.
Un poto no es, laMima, se lo aseguro. Para mí que más bien es un Chlorophytum comosum Variegatum, vamos, la cinta de toda la vida.
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